Es el color más próximo a la luz, y siempre lleva consigo la naturaleza de lo claro, alegre, despierto, de lo suavemente excitante.
Transmite sensación de ligereza, resplandeciente y estimulante.
El amarillo se ha convertido en un símbolo de la capacidad de ver, de elevarse por encima de todo, contemplar y comprender.
Alegría, brillantez, entusiasmo, superación, dinamismo, lucidez.
El tercer chakra, el Manipura nos traslada al mundo del poder, la energía y la voluntad.
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